La menta silvestre es conocida desde hace mucho tiempo por sus propiedades calmantes, el limón es un fuerte agente de limpieza profunda y el ginseng es reconocido por sus poderes curativos y energizantes. La combinación de estas hierbas naturales con ácido salicílico crea una mascarilla de limpieza profunda facial revitalizante que funciona maravillosamente para la piel dañada, estresada y cansada. Elimina las células muertas de la piel, las impurezas, el exceso de grasa, la suciedad y destapa los poros. La piel se sentirá más fresca, saludable y ganará un aspecto impecable.